AdSense

miércoles, 11 de septiembre de 2019

LA TIERRA 3

LA TIERRA 3
Es posible que gracias al positivismo abandonamos parte de nuestra condición de Humanos?
PODER Y EXPLOTACIÓN
Hace unos dos años asistí al nacimiento de tres gatos en una casita de madera preparada para tal fin. La madre a la que se podría caracterizar como salvaje y violenta me dejaba aproximar y al sentir mi presencia uno de ellos, con los ojos todavía pegados, se paraba en la entrada, se alzaba sobre sus dos patas, lanzando zarpazos al aire. La madre natura lo había preparado para defenderse o mejor dicho su instinto de defensa era alto.
Siempre me sorprendo cuando un especulador financiero dice que trabaja y también lo dicen ladrones y estafadores y la verdad que no hacen un trabajo productivo o al menos un trabajo que sirva socialmente. Igualmente, siempre me acuerdo del hotelero patagónico que me decía hace mas de veinte años: Ni los indios quieren trabajar (hacia referencia a la época no muy lejana de esa eufemística protección de la encomienda o esclavitud ilegal, pero aceptada desde el estado que se produjo luego de la llamada Conquista del Desierto, que continuo hasta bien entrado el Siglo XX, como ya explicamos) , pero todos sabemos que la mayoría de nosotros necesita trabajar de alguna manera, para lograr el sustento y la diferencia existe en relación con lo socialmente aceptado y con las leyes.
Como animales llevamos incorporado el instinto de supervivencia y como seres pensantes buscamos las formas adecuadas para lograr esos objetivos de una forma justa.
Poder designa la capacidad o la potestad para hacer algo. La palabra proviene del latín potēre, y este a su vez de posse, que significa 'ser capaz'. Como tal, puede funcionar como sustantivo o como verbo.
Significado de Poder (Qué es, Concepto y Definición ...
https://www.significados.com › poder
Significado de Poder
DEFINICIÓN DE
EXPLOTACIÓN
Explotación es el proceso y el resultado de explotar. Este verbo, procedente del francés exploiter (que puede traducirse como “sacar provecho”), refiere a apropiarse de las ganancias o beneficios de un sector industrial o de una actividad comercial, y a abuso de las cualidades de un individuo o de un contexto.

Por ejemplo: “El millonario inglés quiere participar de la explotación minera en la provincia patagónica”, “Tendremos que optimizar los recursos para que la explotación nos resulte rentable”, “Compañeros, si no nos unimos, la explotación capitalista nunca se detendrá y estaremos condenados a vivir en la pobreza.
En el ámbito de la economía, la explotación refiere a todas aquellas actividades interrelacionadas que posibilitan obtener recursos de una cierta fuente. En este sentido, puede hablarse de explotación minera (para obtener minerales), explotación agrícola (vinculada a las plantaciones), explotación ganadera (bovina, porcina, etc.) o explotación pesquera (relacionada con las especies acuáticas).

Dentro del contexto sociopolítico, la explotación está asociada a las inequidades entre clases sociales y al reparto desigual de los ingresos. La noción refiere a la relación que establecen los sectores dominantes con las clases más débiles. En ese sentido puede hablarse de explotación laboral, que implica una serie de abusos que se cometen contra los trabajadores.
Esta relación de explotación entre empleadores y empleados representa la realidad de un sinnúmero de personas alrededor del mundo. Ni siquiera las pocas personas que aseguran disfrutar de su trabajo (sea porque han sabido esforzarse por cultivar sus vocaciones para tener un mayor control de sus vidas o, simplemente, por haber dado con un puesto laboral donde se sientan a gusto) gozan de condiciones justas. Sin embargo, la injusticia comienza un nivel más arriba, ya que sus jefes son los primeros en verse forzados a enfrentar altísimos impuestos que nada tienen que ver con la situación económica de su país, así como una serie de reglas que ponen en duda el atractivo de ser emprendedor.
Como suele suceder en otros casos, la situación es demasiado compleja como para proponer una solución instantánea. Muchos aseguran que en principio nadie debería aceptar condiciones abusivas a la hora de comenzar una relación laboral, pero llevado a la práctica, no todos pueden darse el lujo de rechazar un puesto de trabajo. Sin embargo, no es necesario llegar a ese extremo para propiciar un cambio; existen oportunidades que no causarían el mismo impacto pero que pueden ayudar a moldear poco a poco la realidad, que no exigen más que un «no» ante una petición desconsiderada o una denuncia en el momento y con las características adecuadas.
https://definicion.de/explotacion/
Pablo González Casanova, de la sociología del poder a la sociología de la explotación
Gilberto López y Rivas
Rebelión
Reseña del libro de Pablo González Casanova. DE LA SOCIOLOGÍA DEL PODER A LA SOCIOLOGÍA DE LA EXPLOTACIÓN. Pensar América Latina en el siglo XXI. Antología e introducción por Marcos Roitmann. CLACSO Coediciones-Siglo del Hombre Editores. Bogotá, 2009. Presentado el 3 de septiembre del 2010 en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM.
La antología de la obra de Pablo González Casanova reunida y presentada por Marcos Roitmann bajo el titulo DE LA SOCIOLOGÍA DEL PODER A LA SOCIOLOGÍA DE LA EXPLOTACIÓN, y el subtitulo Pensar América Latina en el siglo XXI, tiene valor, actualidad y vida propias; esto es, independiente de los distintos veneros donde se origina. Constituye un instrumento indispensable para enfrentar, desde el pensamiento crítico y la coherencia ética que caracterizan a González Casanova, los retos de una ciencia social comprometida con los pueblos en la acuciante realidad que vive la humanidad y, en particular, Nuestra América, en la transnacionalización capitalista neoliberal.
El texto tiene coherencia interna e intencionalidad que refieren al excelente trabajo de Roitmann no sólo en la selección y secuencia de los capítulos integrados, sino también a su introducción, en la que va trasversalmente hilvanando los perfiles del autor en medio siglo de vida intelectual, destacando el carácter multidisciplinario de su obra y proporcionando las coordenadas históricos-sociales y políticas en las cuales descansa, para facilitar una lectura epistemológica.
Introducción
Roitmann destaca que son tres los pilares en los que descansa la obra de González Casanova: las relaciones sociales de explotación, las estructuras del colonialismo interno y la lucha por la democracia y el desarrollo, precisando la responsabilidad ético-política con su realidad y su tiempo, y con los valores y principios democráticos con los que se enfrenta al poder, inmune al desamino y al conformismo teórico.
Plantea el compilador cuatro etapas del pensamiento de González Casanova: la formativa, con una licenciatura en derecho, su maestría en Ciencias Históricas en el Colegio de México y su doctorado en la Sorbona de París, con la tesis “Introducción a la sociología del conocimiento de la América Española a través de la Historiografía francesa”, en la que se observa una primera visión de los estudios que hoy se conocen como colonialidad del saber, esto es, la extrapolación de las ideas de los centros de poder colonial en la interpretación de la identidad y la historia hispanoamericana.
La segunda etapa de 1950 y 1969 en la que se asienta su compromiso antiimperialista, el debate de la sociología empírica y el uso de métodos estadísticos aplicados a la investigación social, así como la reivindicación del conocimiento sociológico como instrumento para trasformar el orden social en busca de un mayor desarrollo político, económico y social de las grandes mayorías.
Destacan en este periodo La democracia en México (1965) y Sociología de la explotación (1969), obras que trasforman la sociología latinoamericana y mundial. En la primera se aplican todas las técnicas de investigación empírica, cualitativa, el marxismo y el estructural funcionalismo, siendo el resultado no un sincretismo teórico, sino una explicación causal de las contradicciones que aquejan al sistema político mexicano. Casanova –sostiene Roitmann— “apuesta por un socialismo en México, donde converjan la tradición humanista y ilustrada del siglo XVIII y la democracia liberal, que se defienda de las opresiones extranjeras imperialistas y fomente una democracia donde todos los ciudadanos, con independencia de su clase, color y etnia, sean participes por igual del desarrollo de la nación.” En Sociología de la explotación, nuestro autor sostiene que la explotación, fundamento del orden capitalista, es incompatible con un sistema político democrático donde se respete la soberanía de los pueblos de América Latina.
El tercer momento abarca entre 1969 y 1989, en que González Casanova reformula las categorías de explotación, colonialismo interno y desarrollo, y plantea otras, como hegemonía del pueblo y soldado trasnacional. Surge su crítica al socialismo burocrático a partir de la defensa del marxismo científico y el humanismo. Es en este periodo en que desarrolla la concepción de una democracia global y universal donde los dos problemas radican en la elección del proyecto democrático: o se opta por la falsa democracia trasnacional asociada, sin soberanía, o bien se vincula a la lucha de clases por la soberanía y la liberación.
La cuarta etapa del pensamiento de González Casanova --acorde con Roitmann-- se extiende desde 1989 hasta la actualidad, con dos puntos de inflexión: la insurrección zapatista de 1994 y la caída de las Torres Gemelas del 11 de septiembre de 2001 en Nueva York. Tiene lugar, lo que González Casanova considera como una reconversión del orden mundial, la hegemonía del imperialismo, el aumento de la deuda externa y la dependencia de las políticas del Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial, unidos a la restauración del capitalismo en los países del antiguo socialismo, que afectan los proyectos de liberación nacional en el sur. Esto provoca el nacimiento de un capitalismo totalitario y de una explotación global, que trasforma el orden mundial en un colonialismo global, cuyo efecto más relevante es la crisis de una democracia excluyente.
A partir de la insurrección del 1 de enero de 1994, el EZLN es concebido por González Casanova como la primera revolución del siglo XXI, destacando su concepto de mandar obedeciendo, la responsabilidad ética, su dignidad. Es el verdadero proyecto de democracia incluyente y universal. El otro eje de su acción intelectual y política es la revolución cubana. También, durante este periodo trabaja en la búsqueda de un nuevo paradigma desde las ciencias de la complejidad, la revolución científica y las tecnociencias. Roitmann sostiene que González Casanova ha ejercido la praxis, ha mantenido una relación ética entre pensamiento y responsabilidad política. Su praxis es una búsqueda permanente, en la que la satisfacción intelectual cede paso a un compromiso democrático en el que no caben las relaciones sociales de explotación y dominio erguidas sobre el colonialismo global. Su cuestionamiento de la sociología empírica y del marxismo reduccionista aleja su obra de dogmas acomodaticios. Al señalar la pertinencia de una sociología de la explotación como contribución especifica al estudio de la realidad social latinoamericana, González Casanova funda su propuesta teórica. Como un ejemplo de rigor que reclama para todo quehacer sociológico aplicado a su praxis teórica, Roitmann plantea el desarrollo del concepto de colonialismo interno, al cual me referiré más adelante.
La introducción a la obra reseñada culmina en destacar la vocación democrática, socialista y humanista de Pablo González Casanova, para quien la democracia se trasforma en un proyecto social de construcción del poder político, de participación social del pueblo en la toma de decisiones: una democracia de la mayoría social y nacional, contra la democracia de minorías o élites políticas neoliberales y trasnacionales. O el pueblo trabajador es soberano, o no hay democracia. La democracia participativa y representativa de América Latina, para serlo realmente deberá incluir y representar a las antiguas poblaciones de origen colonial y neocolonial como autonomía y como ciudadanía, o no será democracia.
Auto percepción Intelectual
La obra inicia con unas breves trazos autobiográficos en la que González Casanova ofrece una información relevante sobre su formación para entender las líneas rectoras de su acción y pensamiento: un padre que hereda al hijo su espíritu de rebelión, las ideas socialistas, el pluralismo ideológico, el respeto por las creencias religiosas de los demás y la opción intelectual; una madre que enseñó el orden y la disciplina, la puntualidad y el trabajo domestico como tarea también de hombres, el arte de vivir y resolver problemas concretos, el gusto por los idiomas y el fortalecimiento de la voluntad.
Los maestros y cursos que dejaron “un buen legado de aprendiz de jurista y bachiller con refuerzo importantes en la historia nacional”. El curso de español de Agustín Yáñez. La influencia decisiva de los maestros de El Colegio de México, cuya mayoría provenía de la España republicana, y que enseñaron “a trabajar para pensar, a investigar lo que no sabíamos, y a escribir de lo que estuviéramos seguros, listos a descubrir errores tras haber hecho esfuerzos por eliminarlos”
La influencia del mejor amigo de esos años, el comunista-martiano cubano Julio Le Riverend Brusone, de quien aprendió a ser tolerante con quienes no pensaban como él, incluyendo a conservadores y burgueses. Las enseñanzas ex cátedra de Alfonso Reyes sobre el rigor de las narraciones alegres sobre literatura, y la forma de mezclarlas con las anécdotas de la vida y de las travesuras.
Los aprendizajes de la vida de estudiante graduado en Francia con Fernand Braudel; los teatros, las lecturas, los museos, el arte de la conversación salpicada de humor, agudeza, y referencias a las lecturas del día. Fue en Paris donde estudio filosofía, sociología y marxismo. En el marxismo, se interesó por Gramsci, cuyas obras completas le regaló Vicente Lombardo Toledano.
“Yo creo –escribe don Pablo—que la forma libre y justa de pensar que me dejo mi padre se reforzó con la filosofía magnifica de Gramsci, y el sentido patriótico que mis maestras de la primaria, y todo el sistema escolar mexicano, se combinaron con el encuentro del comunismo –que yo conocí por Le Riverend y por un amigo tranviario llamado Suarez—y con el nacionalismo marxista leninista al estilo oficial mexicano, en que Lombardo fue un maestro”.
A su regreso a México, el disciplinado estudio de cinco años de estadística y sociología empírica –en el que es auxiliado por un compañero de esos años de la Escuela Nacional de Antropología e Historia, Felipe Montemayor.
En una escala más próxima a la lucha política –señala Casanova—“con La Democracia en México, inicie una exploración de la libertad, de la participación en el gobierno y el Estado, del problema de la soberanía nacional y estatal, y de la necesaria confluencia en el proyecto de quienes piensan o pensaban con filosofías empiristas o marxistas.”
De la amistad fraternal con Luis Cardoza y Aragón, que se fortaleció con su defensa de Guatemala ante el golpe de Estado, González Casanova, reconoce que le debe “un curioso método de criticar las revoluciones sin volverse contrarrevolucionario y de apoyar las revoluciones sin volverse adulón.”
Confiesa que sus hijos, encabezados por Pablo, le enseñaron a deshacerse de su estilo de pensar lombardista o populista. “Con enorme dificultad –expone-- aprendí con ellos, y con su generación, a dar a la democracia, en la que siempre había pensado, un nuevo contenido y nuevo impulso.
I.- De la Sociología del poder a la Sociología de la Explotación
El primer texto esta sección de la obra, “La sociedad Plural”, extraído de La democracia en México, inicia con una definición de marginalismo como la forma de estar al margen del desarrollo del país, el no participar en el desarrollo económico, social y cultural, el pertenecer al gran sector de los que no tienen nada. Las sociedades subdesarrolladas, además, “encierran dos o más conglomerados socio-culturales, uno superparticipante y otro supe marginal, uno dominante –llámese español, criollo o ladino—y otro dominado –llámese nativo, indio o indígena.”
Estos fenómenos se hallan esencialmente ligados entre sí y ligados a su vez con un fenómeno mucho más profundo que es el colonialismo interno, o el dominio y explotación de unos grupos culturales por otros. Casanova sostiene que el colonialismo no es un fenómeno que ocurra a escala internacional solamente, sino que se da también en el interior de una misma nación, como en el caso de México, y que subsiste bajo nuevas formas a pesar de tantos años de revolución, reformas, industrialización y desarrollo.
Haciendo uso del censo, nuestro autor mide el marginalismo a partir de diversos indicadores como el analfabetismo, características de la alimentación y el calzado, por entidades federativas, etcétera, extrayendo de toda esta información conclusiones de las que destaca el marginalismo y la sociedad plural. La sociedad dual o plural está formada por el México ladino y el México indígena; la población supermarginal es la indígena, que tiene casi todos los atributos de una sociedad colonial.

Las formas del colonialismo interno son las siguientes:
1.- Monopolio de un “centro rector” sobre el comercio y el crédito indígena, con relaciones de intercambio desfavorables a las comunidades indígenas, que se traducen en una descapitalización permanente de éstas a los más bajos niveles, así como el monocultivo, la deformación y dependencia de la economía indígena.
2.- Explotación conjunta y combinada de la población indígena por las distintas clases sociales de la población ladina, mezcla de feudalismo, capitalismo, esclavismo, trabajo asalariado y forzado, aparcería y peonaje, servicios gratuitos; se dan salarios diferenciales, explotación conjunta de los artesanos, discriminaciones sociales, lingüísticas, por las prendas de vestir, jurídicas, sindicales, etcétera.
3.- Diferencias culturales y niveles de vida, economía de subsistencia predominante, tierras de acentuada pobreza agrícola o impropias para la agricultura, alta mortalidad general e infantil, analfabetismo, raquitismo, manipulación política.
Este marginalismo social y cultural tiene relaciones obvias con el marginalismo político, el cual es medido por dos indicadores: la información y la votación.
En este capítulo, González Casanova llega a una conclusión critica sobre la antropología mexicana muy coincidente a la de los estudiantes de mi generación en la Escuela Nacional de Antropología e Historia de los años sesenta: “Desgraciadamente, hasta hoy la antropología mexicana que por muchos conceptos nos ha permitido conocer la realidad de nuestro país y que ha tenido un sentido humanista del problema indígena, nunca tuvo un sentido anticolonialista, ni en las épocas más revolucionarias del país. Influida por la metodología de una ciencia que precisamente surgió de los países metropolitanos para el estudio y el control de los habitantes de sus colonias, no pudo proponerse como tema central el estudio del problema indígena como un problema colonial y como un problema inminentemente político.”
En el segundo capítulo de la obra, “El colonialismo interno”, extraído del libro Sociología de la explotación, se va profundizar en esta importante categoría para interpretar la problemática étnico nacional, iniciando con la idea de que las fronteras políticas han influido directa o indirectamente en la formulación y el uso de las categorías sociológicas, acotando que el objeto del trabajo es precisar el carácter relativamente intercambiable de la noción de colonialismo y de estructura colonial, haciendo hincapié en el colonialismo como un fenómeno interno.
Así, la noción de colonialismo interno sólo ha podido surgir a raíz del gran movimiento de independencia de las antiguas colonias. Con la desaparición directa del dominio de los nativos por el extranjero aparece la noción del dominio y explotación de los nativos por los nativos. No obstante, nuestro autor aclara: “Si el hecho de que los grupos y clases dominantes de las nuevas naciones juegan papeles o “roles” similares a los que desempeñan los antiguos colonialistas es censurable o deplorable, o digno de registrarse en el estudio de estas naciones, no es primordialmente los que nos interesa, sino la capacidad explicativa de un colonialismo interno, su potencial de explicación sociológica del subdesarrollo, y de explicación practica de los problemas de las sociedades subdesarrolladas”.
El racismo es un aspecto fundamental de la relación colonial que se destaca: “El racismo y la segregación racial son esenciales a la explotación colonial de unos pueblos por otros, e influyen en toda la configuración del desarrollo y la cultura colonial: son freno a los procesos de aculturación, al intercambio y traspaso de técnicas avanzadas a la población dominada, a la movilidad ocupacional de los trabajadores indígenas que tienden a mantenerse en los trabajos no calificados, a la movilidad política y administrativa de los indígenas.”
Después de analizar las características típicas del colonialismo, González Casanova se pregunta: “¿Hasta qué punto esta categoría –el colonialismo interno—es realmente distinta a otras que emplean las ciencias sociales?... ¿Qué valor explicativo puede tener en un análisis sociológico del desarrollo?:
El colonialismo interno corresponde a una estructura de relaciones sociales de dominio y explotación entre grupos culturales heterogéneos, distintos, y con diferencias de civilización. La estructura colonial y el colonialismo interno se distinguen de la estructura de clases, porque no son sólo una relación de dominio y explotación de los trabajadores por los propietarios de los bienes de producción y sus colaboradores, sino una relación de dominio y explotación de una población (con sus distintas clases, propietarios, trabajadores) por otra población que también tiene distintas clases (propietarios y trabajadores).
En el tercer trabajo compilado, “La explotación Global”, nuestro autor señala que son muchos los que hablan de la desigualdad, pero pocos sobre la explotación. “Se encuentra entre los tabúes internalizados por las comunidades de científicos sociales. Definir la explotación implica, en primer término, reconocer su existencia. En segundo término, reconocer su orden de magnitud. El que éste adquiere hoy características globales nos obliga a precisar que entendemos por global, identificándolo con el proceso de mundialización (Samir Amin) o con la evolución más reciente de la “economía-mundo capitalista” (Inmmanuel Wallerstein), junto con el creciente predominio de organizaciones que se articulan en estructuraciones de carácter mundial o global y que afectan la vida del conjunto de la especie humana y de la naturaleza (Elmar Altvater)
Analizar el problema de la explotación de unos hombres por otros a escala global tiene hoy un significado nuevo: no sólo permitirá platear y eventualmente resolver el problema de los explotados, sino el de los seres humanos. De los “pobres” y “extremadamente pobres”, excluidos y desposeídos, surge hasta nuestro días una enorme población que se ofrece a trabajar como sea y en lo que sea, en condiciones optimas para sus empleadores: se trata de los explotados de la tierra que oscilan entre ser explotados y ser incluidos, aunque generalmente sólo se hable de ellos como “pobres” y “extremadamente pobres”, en un ocultamiento institucional y “humanitario” de la explotación universal, la cual es un mal comprobable y verificable y comprobado por muchos autores. La políticas neoliberales han contribuido a aumentar las trasferencias de excedentes de la periferia al centro del mundo en un orden de magnitud que es superior al de la etapa anterior del capitalismo conocida como el imperialismo monopólico, ya de por sí considerable en el tristemente famoso saqueo del Tercer Mundo. El neoliberalismo ha hecho pagar el costo de la crisis a los países de la periferia, a las fuerzas autónomas, empresariales y estatales que habían iniciado procesos de formación de capital público y social, y, sobre todo, a los trabajadores, pueblos y etnias de la periferia mundial.
Por su parte, los nuevos movimientos de la lucha contra la explotación dan hoy prioridad a la construcción de mediaciones en que se vuelva realidad el ideal de una “democracia para todos” (Subcomandante Marcos) y se eliminen las distribuciones basada en la economía de la cooptación y en los donativos, o en concesiones no acordadas o no consensadas por las mayorías. Así, la lucha contra la explotación sigue siendo una lucha de los trabajadores, pero de los trabajadores unidos a los pueblos, o metidos en ellos como “movimientos sociales”...
VER COMPLETO EN
http://www.rebelion.org/noticia.php?id=112274
Revista Fuentes Humanísticas UAM-Azcapotzalco
De la sociología del poder a la sociología de la explotación. Pensar América Latina en el siglo XXI
Pablo González Casanova
http://bibliotecavirtual.clacso.org.ar/…/casa…/casanova.pdf…
ECOLOGÍA
El turismo sustentable tiene varias patas o soportes, que no deja de tener relación con la dimensión humana de la realidad. Desde ese enfoque humano priman dos cuestiones: a).- El quehacer y la cosmovisión de las comunidades locales y b).- El manejo de los residuos humanos por los administradores y el comportamiento, en relación con lo anterior de los visitantes, Solo con esos dos pares o continuos podemos vislumbrar el éxito o el fracaso de este tipo de emprendimientos. Luego se suma lo concerniente a los tratos interculturales y la realidad ecológica de la zona. Cada uno de ellos cuenta con dos pares o continuos. Desde el punto de vista intercultural se debe plantear claramente la cosmovisión local y lo que quiere o puede esperar el visitante. Sobre la realidad ecológica suele ocurrir que prima una leyenda rosa (elaborada por grandes operadores turísticos), que no la considera exactamente como es para evitar prevenciones de los visitantes y suele ser un primer problema a la hora del trato intercultural.
Aplicando los anteriores conceptos al diseño de proyectos educativos tendremos los elementos básicos para plantear una investigación en el aula o varias ensambla das que permitan y posibiliten otro tipo de educación a la que se le encuentre, mas fácilmente sentido y que no nos deje caer ni en teorías de la conspiración o en el tema libre semi permanente, porque esos son tiempo perdido y de desgaste de la calidad educativa. Si pensamos, afirmamos y practicamos que nada se puede o que todo es mucho es mejor que nos dediquemos a otras cosas, posiblemente mas gratificantes.
ECOLOGÍA
Ecología, 6ta Edición – Thomas M. Smith y Robert Leo Smith
La primera edición de Ecología apareció en 1976 como una versión abreviada de Ecología y biología de campo. Desde ese momento, Ecología ha evolucionado hasta convertirse en un libro de texto destinado a utilizarse en un curso de introducción a la ecología de un semestre de duración. Aunque está dirigido principalmente a estudiantes de ciencias biológicas, al escribir este texto nos guiamos por la convicción de que la ecología debe ser parte de una educación humanista.
Creemos que los alumnos que estudian disciplinas tan diversas como economía, sociología, ingeniería, ciencias políticas, derecho, historia, filología, idiomas y otras similares deben tener una comprensión básica de la ecología por la sencilla razón de que incide en la vida de cada uno.
Estructura y contenido
La Sexta parte explora el tema de las comunidades ecológicas. Esta exposición se basa en los temas tratados en las partes de Tercera a Quinta para examinar los factores que influyen en la distribución y la abundancia de las especies a través de los gradientes ambientales, tanto espaciales como temporales.
EL TEXTO (con opción a descarga) es de http://zootecnistaarg.blogspot.com/…/ecologia-6ta-edicion-t…
Cuestiones de ecología | El factor humano
Existe una tendencia por la cual los ecólogos distinguen entre la ciencia básica de la ecología (el estudio de la interacción de los organismos con su medio ambiente) y la aplicación de la ecología para comprender las interacciones humanas con el medio ambiente. La primera normalmente se asocia con el estudio del «mundo natural», el ambiente aparte de los seres humanos, mientras que la última se ocupa de los efectos de las actividades humanas sobre el medio natural. Esta distinción se extiende a las revistas profesionales en las cuales se informa sobre los resultados de las investigaciones. Los estudios del mundo natural se publican en revistas como Ecology (Ecología) de la Sociedad Ecológica de EE.UU y Journal of Ecology (Diario de ecología) de la Sociedad Ecológica Británica, mientras que la influencia de las actividades humanas sobre el medio ambiente aparece en Ecological Applications (Aplicaciones ecológicas) de la Sociedad Ecológica de EE.UU y Journal of Applied Ecology (Diario de ecología aplicada) de la Sociedad Ecológica Británica. Sin embargo, esta distinción tradicional resulta cada vez más difícil de mantener, tanto en la teoría como en la práctica. Dado que esta distinción se vuelve difusa, los ecólogos tienen que ampliar la propia definición de lo que constituye el «mundo natural». Nuestra especie tiene una influencia cada vez mayor sobre el medio ambiente de la tierra. La población humana actualmente excede los seis mil millones y, como nuestra población, nuestro impacto colectivo sobre el medio ambiente del planeta continúa creciendo. Usamos más del 50 por ciento de los recursos de agua dulce y nuestras actividades han transformado entre el 30 y el 40 por ciento de la superficie terrestre para producir alimento, combustible y fibras (vea el Capítulo 27). Aunque la contaminación aérea ha sido durante mucho tiempo una preocupación, los cambios en la atmósfera producidos por la combustión de combustibles fósiles actualmente puede cambiar el clima de la tierra (véase el Capítulo 29). En su libro de 1989, The End of Nature el ecólogo Hill McKibben declaraba el fin de la naturaleza. El tema central de su declaración fue que los seres humanos habían alterado de tal forma el medio ambiente de la tierra que la naturaleza, «la provincia alejada y salvaje, el mundo aparte del hombre», ya no existía. Aunque muchos de nosotros podemos no estar de acuerdo con McKibben, resulta cada vez más difícil estudiar el mundo natural sin considerar la influencia de las actividades humanas, pasadas y presentes, sobre los sistemas ecológicos que son el centro de nuestra investigación. Por ejemplo, los bosques del este de Norteamérica fueron talados para el asentamiento y la producción agrícola (cereales y/o pastos) en la última parte del siglo XIX. Muchas de estas tierras no fueron abandonadas hasta los años 30 y 40, cuando la producción agrícola se trasladó hacia el Oeste, permitiendo la reforestación (crecimiento de los bosques) en el este de Norteamérica. Los ecológos no pueden estudiar estos ecosistemas sin considerar explícitamente su historia. No podemos comprender la distribución y abundancia de las especies de árboles de toda la región sin comprender los patrones pasados de utilización de los suelos. No podemos estudiar la circulación de nutrientes en las cuencas hídricas arboladas sin comprender la velocidad a la cual el nitrógeno y otros nutrientes son depositados por los contaminantes atmosféricos (véase el Capítulo 22). Tampoco podemos comprender las causas del declive de la población de especies de aves que habitan los bosques del este de Norteamérica sin comprender cómo la fragmentación de las tierras arboladas del desarrollo rural y urbano ha restringido los patrones de movimiento, la susceptibilidad a la depredación y la disponibilidad del hábitat. Algunos de los principales problemas a los que se enfrentan actualmente los ecólogos están directamente relacionados con los efectos potenciales de las actividades humanas en los ecosistemas terrestre y acuático y con la diversidad de la vida que soportan. A lo largo de todo el texto señalaremos estas cuestiones y temas en Cuestiones de ecología con el fin de ilustrar la importancia de la ciencia de la ecología para comprender mejor las relaciones humanas con el medio ambiente: un ambiente del cual constituimos parte. • 1. ¿Cómo definiría la naturaleza? ¿Su definición incluye a la especie humana? ¿Por qué? 2. ¿Cuál consideraría que es el problema ambiental más importante de su tiempo? ¿Qué papel podría desempeñar la ciencia de la ecología (tal y como usted la conoce) para ayudarnos a comprender este problema?
Ecología Thomas M. Smith Universidad de Virginia Robert Leo Smith Universidad de Virginia Occidental, Emérito Traducción Elena Sanjosé Román Revisión Técnica Cristina Crespo Sánchez Alfonso Garmendia Salvador Antonio J. Samo Lumbreras Universidad Politécnica de Valencia Eduardo Aparici Francesc Mezquita Universidad de Valencia
© 2007 PEARSON EDUCACIÓN, S. A. C/ Ribera del Loira, 28 28042 Madrid (España)
https://www.academia.edu/30913…/Ecolog%C3%ADa.6ed.Smith.PDF…
ECOLOGIA Y TURISMO
En general los desarrollos turísticos no tuvieron muy (o nada) en cuenta a la ecología, posiblemente por un desconocimiento (grande) del tema y por ello y vistos los ejemplos que se aportan en la nota citada es importante que se tomen en cuenta en nuestros proyectos educativos, para que los conceptos se difundan. Por otra parte y ya directamente en lo nuestro es una forma de estudiar este aspecto desde diversos ángulos y no solo desde la Biología, porque tanto desde la Geografía, la Historia, la misma Literatura y las Ciencias Exactas se puede aportar, sin necesidad de plantear un trabajo de campo en un Cementerio Indígena.
Por otra parte si no podemos, no queremos o no sabemos como usar los conocimientos multidisciplinarios que conviven en una escuela común o especializada es muy posible que la tendencia al descrédito o desprestigio aumente, con el posible correlato de recortes y pérdida de puestos de trabajo.
ECOLOGIA Y TURISMO
Jorge Morello
Los organizadores de este calificado encuentro hayan pensado que era pertinente una discusión sobre ecología y turismo. Ello significa varias cosas: que se valoriza el crecimiento sostenido del turismo que privilegia la naturaleza, el que en algunos países de América Latina viene aumentando desde 1975 a tasas que rondan del 10% por quinquenio, con picos por países de hasta 20%. que la industria turística está preocupada por prevenir, mitigar o corregir respuestas de la naturaleza a acciones humanas que ponen en peligro la propia actividad. que la diversificación de la oferta por lugar, por región y por país incorpora crecientemente porciones de naturaleza que deben ser manejadas de determinada manera para mantener y potenciar el atractivo. que se ha tomado debida cuenta que América Latina es el continente con mayor diversidad biológica del mundo, con mayor superficie remanente de selva tropical, con mayor riqueza en especies. con respecto a la naturaleza, la industria turística maneja hoy valores y cifras que en los 60 no le hubieran interesado en absoluto, porque se referían a atributos del paisaje sin valor de cambio, incapaces de generar rentas. El diseño de un bosque no tenía precio, fuera de Africa el avistaje de fauna no formaba parte del precio. Hoy aparecen en los folletos de promoción datos como estos: que 3 Km2 de selva amazónica tienen más especies de plantas que el conjunto de las Islas Británicas con sus 300. 000 Km2; que la Argentina, a pesar de ser un país de clima templado posee con sus 9376 especies, una riqueza de flora que la acerca a los países tropicales; que la región Neotropical que incluye un 90% de ALC es la región biogeográfica más rica en especies de todo el globo, con 90.000 plantas superiores contra 30.000 de Africa y 35.000 de Asia Tropical; y se recuerda constantemente que América Latina retiene el 56% de las selvas tropicales del mundo. Hasta hace pocos años este tipo de información aparecía casi exclusivamente én los folletos de empresas como Discovery o en las promociones de los viajes que programaba la Smithsonian Institution, hoy se leen en las secciones turísticas de todos los diarios. Hoy las propagandas turísticas incluyen records ecológicos y biogeográficos tales como: "la masa de hielo continental más importante del clima templado del mundo", "la máxima riqueza de especies de plantas en Río Palenque en Ecuador con 1027 por milla cuadrada, (1,7 Km2) ", "la máxima riqueza en árboles con 300 por ha en el Parque Nacional Humboldt en la selva peruana". Nuestro país, a su vez si somos medianamente cautelosos, podrá ofrecer "los fragmentos de selva tropical-subtropical de rivera más australes del mundo"(Berazategui y en Ensenada); el extremo sur de las selvas tropicales de montaña andina (cerca de Concepción de Tucumán), "la marisma más austral del mundo" en la Mar Chiquita de nuestra costa atlántica; "los bosques caducifolios de gran contraste de color del follaje, más australes del mundo", que son los lengales; los bosques estacionales caducifolios que llegan más al sur en la costa atlántica que son los talares de Madariaga- Pinamar-Gesell. Eso en cuanto al libro de records Guinnes para ecoturismo; pero en un cuanto a platos fuertes singulares la naturaleza argentina ofrece lo que todos conocemos: los únicos glaciares monumentales de acceso terrestre directo como el Perito Moreno; los pehuenales con roble, coihue y coligue que solo compartimos con Chile, pero están mejor conservados del lado Argentino; los palosantales y quebrachales abuelos en la AN protegidas de Parque Nacional en la reserva natural Formosa y en el Parque Nacional Chaco; un mega humedal de mucho más cómodo acceso que el Gran Pantanal; uno de los espacios productivos ocupados con densidades de población humana, de las más bajas del mundo, y fácil acceso como la Patagonia Extra andina; los bosques de madera que se puede trabajar en verde más importantes del mundo, que son al mismo tiempo los bosques de canopeo más atractivo para el camping, y me estoy refiriendo a los algarrobales desde Mendoza hasta Salta; los ciervos de alzada y con calidad de trofeo más australes del mundo; la más alta diversidad de avestruces del mundo y compartido con toda Sudamérica el stock de roedores semidomesticables más diverso y con la especie más grande del mundo. Hoy una playa de arena blanca vale mucho, y si el borde de tierra firme tiene sombra de un bosque plantado vale más, y si está ocupado por selva o bosque nativo vale mucho más, si está ubicada cerca de un área natural protegida vale más, y si al atardecer pasan bandadas de aves acuáticas, su precio es de los más altos del mercado con bastante independencia del paladar del turista demandante. Estoy pensando en casos muy concretos, el de la playa de Manuel Antonio en Costa Rica con borde de selva y Parque Natural, y en las de cabo Polonio y Punta del Diablo en el Departamento Rocha con Parque Natural y avistaje diario de bandadas de aves acuáticas. Hacer camping bajo un pinar o un eucaliptal tienen un precio, pero acampar en un talar con oportunidad de avistaje de fauna nocturna es otro precio. Un palmar con ñandú visible vale mucho. Yo quiero referirme solamente a algunos tipos de paisajes en los que la ecología está contribuyendo crecientemente al manejo de espacios turísticos de alto valor y que son también de alta fragilidad. Resulta obvio que las interfases entre el agua y la tierra contienen los territorios preferidos para el desarrollo turístico, y resulta igualmente obvio que en varios espacios costeros latinoamericanos las acciones humanas han provocado respuestas de la naturaleza que afectan a la base física del turismo. Los litorales son un objeto de consumo turístico importante pero ecológicamente son frágiles y funcionan de manera distinta a la montaña o a un valle y pensamos que cada país debe tener un inteligente política litoral, por razones que indicamos adelante. Veamos primero como funciona una interfase. La frontera entre el agua y la tierra tiene atributos compartidos por los ambientes que le dan origen, básicamente fauna que se alimenta en el mar y nidifica en la cosa, pero sobre todo contiene componentes que le son propios. Durante mucho tiempo el hombre actuó sobre los litorales sin tener en cuenta las características de los mismos, y ello ha llevado a la aparición de respuestas de la naturaleza inesperadas y en algunos casos tales respuestas fueron catastróficas para la industria turística. El ejemplo más conocido son las consecuencias de la forestación y urbanización de campos de dunas interrumpiendo el régimen de transporte de sedimentos, lo que está provocando ecatombes en las costas atlánticas uruguayas entre la Perla de Rocha y Punta del Diablo, con epicentro en cabo Polonio. Para construir infraestructuras en interfases costeras es necesario imaginar lo que ocurriría si colocamos un tabique impermeable entre los sistemas que forman la frontera. Ese tabique o dique lo ponemos cuando construimos una rambla costera, una escollera, una forestación sobre un campo dunar. Lo primero que hay que preguntarse es si esa infraestructura cambiará la interrelación y los intercambios que se establecen entre el agua y tierra firme. La segunda pregunta es si esos cambios en las interacciones alteran negativamente algunos de los servicios y bienes naturales que son demandados por el turismo, digamos el flujo de sedimentos, el retorno de arena a la playa, la altura de oleajes la recepción y rápida dilución y dispersión de afluentes domiciliarios, etc. Si los tabiques separan paisajes que ejercían uno sobre otro cierta influencia o existía entre ellos un transporte horizontal neto, como entre las cabeceras de valles y las bajas cuencas (masa de aire, sedimentos, masa y agua, nutrientes y diseminulos, efluentes, contaminantes) ciertos mecanismos se taponan y pueden aparecer efectos no deseados. Estos tabiques que frenan flujos o los cortan son los llamados tabiques impermeables verticales. Desde hace casi 30 años los ecólogos saben que hay varios tipos de frontera y que entre el agua y tierra firme se trata de una interfase muy brusca, de recorrido definido y grano grueso. En una frontera de gran contraste los componentes biológicos de los ecosistemas contiguos no actúan unos sobre otros de una manera muy activa, pero sí interactuan con gran potencia los componentes físicos fundamentalmente el movimiento de masas de agua y aire. Esas interfases bruscas son la residencia de intercambios de energía muy importantes y el ancho del litoral es el amortiguador de ese intercambio de energía, básicamente del oleaje. Si el litoral es ocupado inevitablemente la almohadilla o el buffer desacelerador del oleaje y el viento se enangosta y los impactos van a ser más fuertes. En cuanto a seres vivos los intercambios son pasivos, se hacen en forma dominantemente detrítica, lo que la tierra manda pasivamente al mar son cadáveres o porciones de cadáveres y los intercambios son dominantemente de detritus. Por el contrario en fronteras menos contrastadas graduales digamos entre un bosque y un pastizal los seres vivos escogen partido continuamente, forrajeo en el bosque, pastoreo en el campo abierto, nidificación en el bosque, termoregulación escogiendo diariamente partido entre algo con más y algo con menos brisas; control de plagas y ectoparásitos, sobre todo mosquitos y garrapatas, escogiendo partido entre la isleto de bosque y el pastizal contiguo, etc. Esta elección de un ecosistema para cumplir una función, digamos la de reproducción y otro para alimentarse está ligada a procesos suaves de movilidad a muy corta distancia, transporte y turbulencia y los tres procesos operan de una manera mucho más activa en el deslinde agua-tierra. Transporte, movilidad y turbulencia cambian de calidad se atenúan o se potencian cuando el desarrollo turístico manipula la interfase y su resultado es la formación de tabiques impasables en relación, sobre todo, a movimientos horizontales o laterales. Si en lugar de mirar una interfase desde el punto de vista de su contraste o gradualidad lo hacemos en función de la intensidad de los intercambios de energía y materiales las podemos clasificar en pasivas, activas y asimétricas. Los intercambios biológicos entre fronteras pasivas son bajos, en las activas son numerosos y un tabique cambia el comportamiento de los dos ecosistemas y en la asimétrica domina una dirección preferencial, son las fronteras de los Deltas y los litorales urbanos o periurbanos. Dentro de la interfase costera marítima el complejo de campos de dunas es el ecosistema más frágil y actividades turístico recreativas como el transitar con vehículos todo terreno pueden cambiar totalmente el comportamiento de las dunas por destrucción de todo tipo de epidermis protectora. Quiero detenerme en el tema de los campos de dunas. Pocos usuarios poseedores de un todo terreno saben que hay costras dunares e interdunares de muy diverso tipo, de arcilla, de limo y sales, y los llamados biodermas o costras vivas de algas. Esas costras funcionan como contenedores del movimiento de la arena durante determinados períodos. Las huellas cruzadas de los vehículos todo terreno permiten la movilización del material subyacente por gravedad, por el viento y por el agua, cambiando totalmente el perfil de la duna. Los perfiles dunares transitados y sin costra se van achatando y las descomunales dunas de más de 45 m se van transformando en un sistema de suaves colinas móviles. El experto en turismo debe estar informado sobre la dinámica morfogénetica en duna intacta y en duna trajinada por vehículos, sobre la destrucción de habitats en las depresiones interdunares, sobre la destrucción de la vegetación dispersa y del microclima que ellas crean bajo sus copas en las depresiones, sobre las microlagunas temporarias de la interduna con costra cuevas de fosores o cavadores que desaparecen. En cuanto a cambios higrotérmicos todos nosotros hemos caminado en verano en dunas con costra intacta y con costra desecha y todos hemos sufrido las temperaturas que llegan a los 80 grados en la duna sin costra. Uruguay fue un eficiente y orgulloso país plantador de pinos y fijador de dunas y los nombres de Piria y Lusinchi son pronunciados con respeto por todo el sector de la industria turística nacional. Piria y sus seguidores jamás hubieran pensado que la Dirección de recursos forestales del Ministerio de Agricultura tendría que implementar un costoso proyecto de desbosque de las dunas entre Aguas Dulces y Cabo Polonio porque si no lo hacía el tómbolo de la puna turística iba a perder su unión a tierra y se iba a transformar en una isla. El escenario de las costas de la cuenca del Plata sobre todo de las playas del Uruguay y Paraná y de sus tributarios fluviales y el litoral Atlántico del sur de Brasil y Uruguay está plagado de ejemplos de aparición de cubetas de erosión costera y de desplomes de barrancas, no en la porción viva, sino en la muerta del meandro, de descalzamiento de bosques ubicados en líneas de ribera y de infraestructuras de muy alto costo colapsadas o que ya no son funcionales por cambios en la interfase sobre todo en las geoformas.
http://nulan.mdp.edu.ar/210/1/Apo1997a1v2pp21-26.pdf
nulan.mdp.ed
significados.com
Encuentre aquí Significados, Conceptos y definiciones sobre diversos temas

No hay comentarios:

Publicar un comentario